Mauro Giuliani: Rossiniana nº 1 para guitarra Op. 119
Fecha de publicación: 18 de noviembre de 2011
AUDICIONES DE MÚSICA CLÁSICA. Continuando con la publicación de la Hemeroteca de Música Clásica traigo hoy a Clasica2 una delicada obra. El descubrimiento se lo debo a mi amigo Leopoldo que, entre otras muchas cosas, es un egregio crítico musical, magnífico escritor, incansable divulgador cultural y, sobre todo, una buenísima persona.
Él me hizo llegar, entre otras “joyas”, un disco que abrió nuevos horizontes a mi afán de encontrar rarezas y a mi curiosidad por oír partituras fuera de lo que los repertorios al uso ofrecen. Por ello, en público agradecimiento a Leopoldo y en aras de poder compartir con vosotros la satisfacción que me produzco su escucha, aquí queda la Rossiniana nº 1 para guitarra Op. 119 de Mauro Giuliani (1781-1829).
MAURO GIULIANI ROSSINIANA Nº 1 PARA GUITARRA
El italiano Mauro Giuliani, virtuoso guitarrista y compositor, representa con los españoles Fernando Sor (1778-1839) y Dionisio Aguado (1784-1849) la tríada que eleva, -a principios del siglo XIX-, a la guitarra a la categoría de instrumento concertístico de primer orden.
Giuliani, que cuando tenía 19 años salió de su Italia natal para recorrer Europa con su guitarra, recala en Viena en 1806. Su reputación se consolida cuando en 1808 estrena su Concierto para guitarra en La Mayor Op.30. Beethoven, conocedor de su talento, escribió algunas piezas para guitarra pensando en Mauro. En justa reciprocidad, Giuliani se ofreció como chelista para el estreno de la Séptima sinfonía del compositor alemán.
Alrededor de 1814 Giuliani es nombrado "virtuoso onorario di camera" de la segunda esposa de Napoleón la Emperatriz Maria Luisa. De vuelta a Italia en 1819, y tras rodar de acá para allá, en 1823 se establece definitivamente en Nápoles, donde fallece en 1829.
AUDICIÓN DE MÚSICA CLÁSICA
Las Rossinianas, publicadas bajo los Op.119-124, es un grupo de seis sonatas para guitarra que Giuliani empieza a escribir cuando, durante una prolongada estancia en Roma en 1820 y ante la dificultad de encontrar audiencia para sus obras, decide aprovechar el éxito de Rossini y sus óperas para captar público. Para ello escribe una especie de fantasías para guitarra sobre temas del compositor de Pésaro.
Mauro Giuliani Rossiniana nº 1 Op. 119.
GUÍA DE AUDICIÓN
Dos palabras para comentar la audición. La pieza comienza -Andantino- en tono melancólico. La tensión crece gradualmente mediante la repetición de pequeñas células temáticas, técnica expresiva tan querida por Rossini. Un desolado pasaje nos lleva a una especie de paráfrasis de aria operística, -Andante gracioso-, que en su segunda parte incorpora ese toque humorístico rossiniano. Este motivo hace las veces de tema a la serie de variaciones que se desarrollan a continuación. Un Allegro, con una secuencia de los característicos crescendos de Rossini hasta alcanzar un clímax de fuerte impacto emocional, cierra la obra.